Calle nueva 1950
Refranes
populares
- La mujer
y la sardina en la cocina.
- Contigo
pan y cebolla.
- El
demonio no es demonio por malo sino por viejo.
- Dame pan
y dime tonto.
- El que
quiere peces que se moje el culo.
- Quién mal
anda mal acaba.
- Nunca es
mal año por mucho trigo.
- Febrero
el loco, ningún día se parece a otro.
- Perro
ladrador poco mordedor.
- No se
puede hablar de los perros hasta llegar al cortijo.
- Dos no se
pelean si uno no quiere.
- Nunca
llueve a gusto de todos.
- Aunque la
mona se vista de seda, mona siempre se queda.
- Pan con
pan comida de tontos.
- El
valiente e valiente mientras el cobarde quiere.
- Dime con
quién andas y te diré quién eres
- Se coge
antes a un embustero que a un cojo.
- A buena
hambre no hay pan duro.
- Quién más
puso más perdió.
- A río
revuelto ganancia de pescadores.
- Dios
ahoga pero no aprieta.
- En tiempo
de borrasca no hay puerto seguro, lo mismo se mete allí que en el culo.
- El que
calla otorga.
- Aquel que
más alto sube más fuerte el porrazo da.
- El que
mucho duerme poco vive.
- Lo que no
ve la boda no lo ve la novia.
- Te
casaste, te enterraste.
- si una vieja te los da, tómalo peor es
na.
- El vino
nunca es malo, pero es mejor que agua bendita.
- El último
es el que se ahoga.
- El que
mucho abarca poco coge.
- En casa
de herrero asador de palo.
- Predicar
en balate es un disparate.
- El que
paga manda.
- Sabe más
un necesitado que cien abogados.
- Dicen que
el dinero llama al dinero, sí pero el mucho es poco.
- El pez
muere por la boca.
- Que si
quieres arroz Catalina.
- La mancha
de una mora con otra verde se quita.
- Y un
resbalón cualquiera da en la vida.
- Bendito
sea Dios que ya apareció el
perdido, nunca se puede perder pájaro que tiene nido.
- A quién
Dios se la de San Pedro se la bendiga.
- Mi gozo
en un pozo.
- El mejor
escribano echa un borrón.
- El que
mucho quiere todo lo pierde.
- Año de
nieves, año de bienes.
- Cántaro
que va la fuente, alguna vez se rompe.
- No hay
mal ni bien que cien años dure, ni cuerpo que lo resista.
- De aquí a
la mar todo es tierra.
- Camarón
que se duerme la corriente se lo lleva.
- El que
pregunta no yerra.
- El ojo
del amo engorda al caballo.
- Al perro
flaco todo se le vuelven pulgas.
- Quién
come y bien bebe solo de viejo se muere.
- El que
busca encuentra.
- A fuerza
mayor, hierro en medio.
- En boca
cerrada no entran moscas.
- Quién
canta sus penas espantan.
- Has bien
y no mires a quién.
- Dos que
duermen en un colchón se vuelven de la misma opinión.
- A perro
que no conozcas no le toques las orejas.
- Si te
curas con malvas, mal vas.
- Donde
manda patrón no manda marinero.
- Quién
anda con lobos a aullar se enseña.
- Hambre
que espera hartura no es hambre ninguna.
- Pan para
hoy, hambre para mañana.
- A las
penas puñales.
- Aquí paz
y allí gloria.
- Dichosos
aquellos que a los suyos le parecen.
- Quién
tuvo retuvo y guardó para la vejez.
- La ansia
del pobre, antes reventar que sobre.
- No
quieres caldo, tres tazas y si te repugna treinta y una.
- Yo arto,
todo el mudo arto, quita la mesa muchacho.
- El
maestro ciruela no sabía leer y puso una escuela.
- Los
enemigos del hambre son tres: suegra, cuñada y mujer.
- Las
mejore inyecciones chorizos y jamones.
- Agua que
no has de beber déjala correr.
- Hombre
pobre y leña verde para cuando hay ocasiones.
- No es mal
amigo el que avisa.
- Agua
parada no mueve molino.
- La cara
es el espejo del alma.
- Quién
siembra tormentas recoge tempestades.
- La casa
vieja todo son goteras.
- Cuando el
río suena agua o piedras lleva.
- La mujer
y la sartén colgadas están bien.
Luna, fuiste mi testigo
ResponderEliminarcuando me enamoré
no salió como quise
todo me salió al revés.
Otra vez que me enamore
no te quiero de testigo
lo haré a mi manera
perdona lo que te digo.
Manuel Palomares